Los parques de Boadilla del Monte son un remanso de paz y vegetación a tan solo 30 minutos de Madrid.
La naturaleza puede ser extremadamente terapéutica. En contraste con la ciudad, donde el bullicio de las calles y el tráfico pueden resultarnos agobiantes, el entorno natural tiene en nosotros un efecto calmante y regenerativo. Pasear o montar en bici por espacios naturales, resulta una actividad física muy beneficiosa para nuestra salud, además de muy entretenida porque se puede practicar en familia
El municipio de Boadilla del Monte disfruta de 16.260.000 m2 de bosque con gran valor de foresta y fauna. A esto se añaden 2.400.000 m2 de zonas semiforestales. Esto hace que casi el 50% de su superficie sea zona verde, forestal o ajardinada.
A su vez cuenta con casi 60 parques repartidos por el municipio, los cuales ocupan una superficie aproximada de 480.000 metros cuadrados. Si a ellos sumamos el resto de zonas ajardinadas y las áreas forestales, el conjunto de zonas verdes alcanza los cinco millones de metros cuadrados, convirtiéndose así en el pulmón verde de Madrid.
Entre los parques de Boadilla del Monte, el más grande es el parque de Juan Carlos I, en Viñas Viejas, con 35.000 metros cuadrados de extensión. Le sigue el parque Juan Pablo II (22.500 metros cuadrados), en Boadilla pueblo.
Cabe destacar por supuesto, de entre los más singulares, los jardines del Palacio del Infante Don Luis, de influencia italiana rehabilitados con las especies originales, tilos de Holanda, cipreses de la Toscana, lilos, moreras y más de 10.000 bojes que lucen en su parterre; y el casi recién estrenado Mirador del Nacedero, un parque forestal también en el entorno del palacio, perfecto para pasear, ya no solo rodeado de naturaleza, sino de un monumento neoclásico del siglo XVIII que otorga gran belleza y elegancia a la zona.
Por otro lado, hay un total 33.400 metros cuadrados de praderas de césped y cerca de 3.000 árboles. El plátano y el pino son las especies más comunes de entre las 74 diferentes que hay en todo el municipio. Entre estas, hay algunas menos habituales pero de gran belleza, como el liriodendron tulipifera (en la iglesia de Las Lomas); o el acer rubrum que podemos encontrar en el parque Juan Pablo.
Esta gran cantidad de zonas verdes y parques en Boadilla del Monte hacen que la calidad del aire sea excepcional, ayudando a vivir menos estresados y mejorando así nuestra salud y la calidad de vida. Es por eso que las promociones de viviendas están tomando mucha importancia para los que quieren vivir una vida más tranquila sin alejarse demasiado de la actividad diaria de la ciudad.
La posibilidad de hacer running, montar en bicileta o simplemente salir a dar un paseo por los alrededores de Boadilla es una oportunidad de tomar aire fresco y disfrutar de los sonidos más naturales.
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