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La entrada de luz natural en nuestra vivienda es fundamental. La iluminación procedente del sol aporta valor, salud y ahorro a nuestro piso o chalet.
En los hogares que construye La Cambrija en Boadilla del Monte los grandes ventanales y entradas naturales de luz son fundamentales y se encuentran presentes en todas las estancias de la casa.
La luz natural cobra vital importancia en los dormitorios, y en especial en los destinados a ser la habitación de bebés y niños. Los más pequeños de la casa pasan mucho tiempo en sus dormitorios, ya sea dormidos o empleando su tiempo en ocio o tareas escolares. Una cantidad adecuada de luz natural es vital en estos espacios, y además supondrá un ahorro para nuestros bolsillos.
Unas ventanas y cortinas adecuadas nos permitirán además poder jugar con la luz a medida que crezca el niño y sacarle más partido.
Bebés y padres comparten mucho tiempo juntos en los dormitorios. La mayoría de las necesidades de los niños de corta edad se desarrollan en su habitación, por eso no es una opción viable mantener encendidas las bombillas y lámparas durante casi todo el día. Colocar la habitación del bebé cerca del jardín o en un espacio abuhardillado puede ser una decisión muy útil.
Las ventanas de cubierta inclinada proporcionan dos veces más luz natural que una ventana vertical y hasta el triple que una ventana incrustada en la pared.
A pesar de crear espacios muy luminosos, unas cortinas opacas sobre algún visillo translúcido nos permitirá adaptar la luz a las horas de descanso o mayor temperatura exterior.
Según crecen los más pequeños de la casa, la luz del sol sigue siendo esencial para su desarrollo físico e intelectual. La capacidad de absorción de la vitamina D, esencial en la formación de los huesos, depende en gran parte de las horas de exposición a la luz solar. Por eso, y a pesar de que probablemente pasen más tiempo fuera de sus dormitorios, estos deben seguir contando con una generosa iluminación natural. Para ello se hace totalmente imprescindible situar la zona de juegos o estudio cerca de la ventana.
Sin embargo, hay que tener en cuenta dos momentos fundamentales en estas etapas de adolescencia, el descanso y el uso del ordenador. En las horas de sueño la luz debe ser cómplice de un descanso reparador, necesario en una edad con una actividad física muy importante. Y con respecto al uso de la pantalla del ordenador, hay que evitar situar estos dispositivos en lugares donde puedan reflejarse los rayos del sol y provocar deslumbramientos.
Tres terrazas, una zona de jardín y una amplitud inmensa proporciona a los chalets del Residencial Viridis III toda la luz natural que necesitas para ti y los tuyos. Contacta ahora con Grupo La Cambrija y haz realidad tu hogar.
